Esta es una receta improvisada, empiezas a echar cosas que te sobran por el frigorífico y al final queda algo bastante rico. Os animo a hacer recetas así.
Ingredientes:
- Medio litro de caldo de pescado (de tetrabrik, o casero si tenéis).
- Una taza de agua.
- Una zanahoria.
- Media cebolla.
- Un diente de ajo.
- 150 gr de almeja pequeña cocida (un bol).
- Tres palitos de cangrejo.
- Vino blanco verdejo.
- Una cucharada sopera de tomate frito.
- Perejil fresco.
- Jengibre en polvo.
- Clavo.
- Aceite de oliva.
- Sal.
Preparación:
Picar la media cebolla en trozos muy pequeños, y el ajo en láminas finas (recomiendo quitar el germen, para que no repita). En una cazuela rehogarlo todo a fuego suave, primero los ajos, y cuando empiecen a coger color, añadir la cebolla.
Cuando empiece a ablandarse, añadir la zanahoria cortada en tiras finas (con un pelapatatas, se hacen peladuras finas y alargadas que quedan bien), y rehogar unos minutos hasta que la zanahoria comience a ablandarse.
Añadir las almejas y los palitos de cangrejos cortados en dados. Rehogar un par de minutos.
Añadir un chorro generoso de vino blanco (1/3 de vaso de nocilla) y dejar reducir, dando vueltas de vez en cuando.
Añadir ahora el caldo de pescado, el agua, las hojas de perejil troceadas, una cucharada sopera de tomate frito, el jengibre en polvo (una cucharada de cafe aprox) y el clavo en semillas (unas cinco o seis vale).
Dejar hervir a fuego suave unos 10 minutos, dando vueltas de vez en cuando, y corregir de sal al gusto.
Es bastante fácil. Como veis de japonesa no tiene nada, pero me recordaba un poco, y con el jengibre ya tenemos el toque oriental. Os recomiendo no tomarla con palillos, sobre todo porque es muy difícil coger el caldo.
Guille